Quién se lo iba a decir...

El muy conservador John H. Kellogg pensaba que una buena alimentación, con los Corn Flakes entre otras cosas, contribuía a disminuir el deseo sexual (eran otros tiempos). Si viera esto ahora, yo creo que se le caería el bigote del susto:

¡La de vueltas que puede dar un producto!
Si Coca-Cola empezó como un jarabe para el estómago o Levi's como pantalones resistentes para trabajar, la cosa está clara: como decían en el anuncio de Aquarius, la gente hace lo que le da gana. 

Así que ya sabes, si le quieres contar un chiste al mercado, cuéntale tus planes. Porque, al final, ese "mercado" tan abstracto del que se habla (que si se expande, que si se acelera, que si evoluciona...), está formado por personas. Y, aunque sólo fuera a largo plazo, sus opiniones, decisiones y acciones cuentan mucho más de lo que parece.