lunes, 30 de junio de 2014

Visionarios sin fundamento


Este anuncio nos recuerda a una situación que se da a menudo en las agencias. Ese temido momento cuando un cliente te suelta el clásico "no lo veo" (a veces camuflado de "me suena raro", "le falta algo", "no me termina de encajar, dale una vuelta"... ). Da igual la expresión, porque todas significan lo mismo: que lo que has presentado no les gusta pero no saben decirte por qué.

Sin embargo, el cliente no es el único experto en dar respuestas difusas y sin fundamento. En otras ocasiones provienen del departamento de cuentas, y eso sí que es grave. ¡No nos tiremos piedras en nuestro propio tejado!

A ver, si algo no funciona o a otros les cuesta "verlo", nuestro trabajo es solucionarlo. Pero en Mr. No Name sabemos que un "no lo veo" en cualquier variante no ayuda a nadie: no podemos resolver algo si no sabemos lo que falla. Por eso, hacemos el esfuerzo de argumentar siempre nuestras críticas.

Lo primero es preguntarse en concreto qué es lo que no funciona: ¿el mensaje es confuso?"; "¿La gráfica no encaja con la marca?"; "¿Tal vez el concepto es demasiado arriesgado?"; etc. Una vez tengamos la/s respuesta/s podremos trabajar sin dar palos de ciego. Esto no sólo hace que el trabajo del equipo creativo sea más eficiente; también nos ayuda a mejorar con cada crítica (constructiva, a ser posible ;-)

En el departamento de cuentas de Mr. No Name nos esforzamos en hacer buenas preguntas y críticas con fundamento, porque sabemos que mejoran el trabajo de la agencia. Además, hay otra razón por la que vale la pena analizar lo que no funciona: nosotros también nos equivocamos y, cuando se reconocen sin dramas innecesarios, se aprende mucho de los errores. 

Por último, otras veces el problema eres tú. Sí, tú como individuo. Todos tenemos nuestras filias y fobias personales que afectan a nuestra percepción, y sólo nos damos cuenta cuando ponemos en palabras objetivas una sensación subjetiva. ¿Te parece raro? Te aseguro que ocurre. A nosotros nos pasa.

Por eso, tenemos presente que no se trata de que nos guste a nosotros o al cliente: se trata de provocar la reacción del consumidor final. No siempre hacemos exactamente lo que el cliente nos ha pedido, hacemos lo que necesita. Para nosotros esto es Talcualogía

Dicen que hablando se entiende la gente. Estamos de acuerdo, pero le añadimos que con argumentos claros y sólidos aprendemos día a día, el trabajo es más eficaz y, en definitiva, nos entendemos mucho mejor.

martes, 17 de junio de 2014

"Perdone pero... Es usted un cerdo".


Dos de las máximas de Mr. No Name (Talcualogía y Detúatúismo) señalan lo importante que es ir con la verdad por delante. Aunque, claro, somos conscientes de que a veces no es posible decir exactamente lo que piensas. En esas ocasiones, necesitarás una buena dosis de diplomacia o una combinación letal de creatividad y astucia como la que compartimos hoy en este post.

¿Cómo le dices a tu jefe que tus condiciones laborales son vergonzosas? ¿O que ya basta de explotar a la gente? ¿O que te debe dinero desde hace meses? Pues poniendo en la entrada de su empresa un "bonito" muñeco hinchable de un cerdo, una rata, una cucharacha o un lobo. ¡Que todo el mundo lo vea!

Así han protestado diferentes sindicatos en Estados Unidos contra las malas prácticas de sus empresas. Nos encanta porque dice todo lo que tiene que decir sin palabras y, además, transmite el tono de indignación del mensaje. Una acción contundente y más o menos anónima. Bien por ellos.

martes, 10 de junio de 2014

No confíes en algo sólo porque encaja


Este post lleva el mismo titular que la campaña de Volkswagen: "Don't rely on something just because it fits". La imagen deja claro el concepto, así que no hace falta explicarlo. Lo curioso es que también se puede aplicar a la publicidad. Hoy vamos a hablar de dos fenómenos relacionados con esta idea. Los dos con nombre propio:

"Fenómeno calzador". Ocurre cuando la idea del anuncio o comunicación pega tanto para el producto o la marca como llevar un chándal con unos stilettos de Prada. Un tipo de "fenómeno calzador" son los que comentamos en el post "Pon el logo al final y ya está". Suele ocurrir por culpa del "ombliguismo":
  • Obliguismo del cliente: se empeña en una idea y no atiende a razones cuando se le demuestra que no funciona.
  • Obliguismo de las agencias: los creativos nos enamoramos tanto de nuestra creación que la queremos implantar cueste lo que cueste. 

"Fenómeno Frankenstein". ¿Has visto alguna vez un anuncio o comunicación en el que gráfica, ideas y mensajes bailan a su ritmo sin ninguna armonía entre sí? La razón suele ser porque, tras muchos cambios y parches varios, la idea original se deforma hasta resultar irreconocible. 
  • El cliente es el responsable: ha impuesto cambios que no pueden hacerse tal como los quiere (y no acepta otras opciones); o esos cambios afectan a uno de los pilares maestros de la propuesta, con lo que se derrumba sin remedio. 
  • La agencia es la responsable: o bien porque no hemos sabido transmitir al cliente que esa idea no funciona si necesita esos cambios; o bien porque, una vez más, nos empeñamos en sacarla adelante de cualquier forma, incluso aunque deje de tener sentido. 

jueves, 5 de junio de 2014

Unas chancletas expanden la epidemia


La tabarra que estamos dando con la promiscuolaboración. Pero no es culpa nuestra. Bueno, un poco, por desear que se convirtiera en una pandemia ;-)

Hemos tenido casos de producción audiovisual, alimentos, peluches y tiendas multimarca. Pues bien, ahora son los zapatos los que se han contagiado.

La marca de ropa sostenible ECOALF y SIGNUS, gestionadores de neumáticos usados, se han unido para crear las primeras chancletas españolas a partir de goma reciclada. Pero no habrían sido capaces de realizar este proyecto sin la ayuda del Centro Tecnológico de Calzado de La Rioja.

Un caso de promiscuolaboración triple y, encima, ecológica. Bravo.

lunes, 2 de junio de 2014

Súbete a la actualidad sin meterte en un jardín


Alguien graba algo incómodo e intentan quitarle el móvil por las malas. ¿Te suena la situación? Seguro que sí. Por ejemplo, si eres de los que prefieren bucear en youtube para saber qué ha pasado durante una manifestación que terminó de forma violenta. 

Los altercados en las manifestaciones son un tema de actualidad espinoso. La virtud del anuncio de Sra. Rushmore para Vodafone es mostrar una escena que nos lo recuerda con toda su fuerza y su polémica; pero sin meterse en camisa de once varas. Porque no hace ninguna falta si eres lo bastante astuto como para ser claro y sutil al mismo tiempo. Justo lo que no consiguió Beats by Dre, que insultó a muchos clientes potenciales sin ninguna necesidad.

Sin embargo, hay un mensaje en el anuncio con el que no estamos de acuerdo: no son buenos tiempos para ser periodista. Esta profesión se ha convertido en un deporte de riesgo en España, como demuestra este vídeo. (Aunque seamos francos: tampoco son buenos tiempos para ser policía. Y además, ellos mismos denunciaron en 2012 la que se nos venía encima y nadie les hizo caso).

Los hechos del último enlace han ocurrido delante de las cámaras, imagínate qué habría ocurrido sin ellas. No hay que olvidar que, en este tipo de situaciones, las cámaras nos protegen a todos: periodistas, policías y ciudadanos en general. Ya que con las imágenes se puede identificar de forma concreta al culpable del abuso para pedirle cuentas. 

Esto supone otro gran acierto en el anuncio: ahora es más importante que nunca que cualquiera que esté con su smartphone en la calle se convierta en periodista y pueda subir sus vídeos a la velocidad del rayo. 

jueves, 29 de mayo de 2014

7 Pecados Laterales: Victoria.

Otros pecados laterales


En Mundo Lateral, mucho antes de la abolición de la obediencia por ineficiente, floreció un imperio con un poder arrollador. El mito trascendió gracias a unos incunables que narran las proezas y personajes prominentes de una de las civilizaciones más brillantes que existieron: los hipopotámicos.

Los hipopotámicos desarrollaron grandes inventos como el molino de riego, el tiovivo a vapor, la rueda, el helado de frutos del bosque, la epistemología o la ropa interior; por este orden. También fueron expertos navegantes y astutos diplomáticos; unos maestros en el comercio y profundos filósofos. Pero, sin duda alguna, por lo que más eran respetados -y temidos- era por su poderoso ejército, conocido como Trenza Dorada.

De Trenza Dorada se decía que si la vieras recortando la silueta del horizonte ya estarías atravesado por sus flechas. Se contaba que todos sus caballos galopando provocaban corrimientos de tierra, que sus magos conocían el secreto para matar a los vivos y rematar a los muertos, que sus máquinas de guerra podían empujar un castillo entero hasta despeñarlo por un barranco; que sus guerreros eran tan bravos que podían combatir con un brazo cercenado, incluso su brazo cercenado podía combatir sin el guerrero...

Lo cierto es que Trenza Dorada era tan desproporcionadamente poderosa que jamás tuvo que acometer ninguna batalla. Cuando un poblado sabía que los hipopotámicos se acercaban para invadirles, recogían sus cosas y se marchaban lo más rápido posible. Algunas ciudades dejaban comida preparada para inspirar su piedad y no ser perseguidos.

La civilización hipopotámica extendió su territorio a tanta velocidad que su población no nacía al ritmo suficiente para poblarlo. Esto, sumado a que los pueblos invadidos no dejaban ni un famélico esclavo, acabó por hacer insostenible su política imperialista. ¿Para qué invadir territorio abandonado que además precisaba ser vigilado para no ser reconquistado?

En el senado se tomó una decisión drástica: debían hacerse más débiles o ningún pueblo querría guerrear con ellos. Trenza Dorada se disolvió otorgando jubilaciones doradas a sus ex mandos. Después, enviaron espías a otros reinos para que hicieran correr el rumor de que Hipopotamia estaba en decadencia y les filtrase información acerca de sus debilidades. Además, por ley establecieron una proporción mínima de batallas que debían perder y daban por lo menos un mes de plazo al enemigo para que este pudiera prepararse sin ansiedad.

Pronto se extendió la noticia: los legendarios hipopotámicos no eran inmortales. Se decía que sus elefantes copulaban en mitad de la batalla aplastando a sus conductores, que todos sus arqueros eran bizcos o padecían temblores, que sus guerreros no estaban uniformados y se equivocaban al embestir con la espada… Aunque lo cierto es que muchas veces se dejaban ganar. Pero esto era un secreto diplomático que no se revelaba al enemigo por cortesía y para no minar su moral.

De esta forma, las guerras volvieron a su natural equilibrio y la civilización hipopotámica, cuna de la cultura lateral actual, pudo extenderse gracias al saqueo y pillaje de los pueblos que ahora sí tenían la esperanza de conservar sus bienes. Y de vez en cuando, los conservaban, para su gran regocijo.

Desde entonces en Mundo Lateral, en cualquier tipo de competencia, se celebra el ganar, sí, pero de forma variada y equilibrada. Si se abusara de la Victoria se acabaría el comercio, los concursos de longitud de bufandas y el botepié, entre otras muchas cosas. Allí no importa ganar, ni siquiera participar: importa el juego.

lunes, 26 de mayo de 2014

¿Hacer el bien tiene recompensa?


En un post anterior comentamos el "lado oscuro" de la publicidad con un anuncio que hace que nos avergoncemos de nuestra profesión. Menos mal que existen otros ejemplos que demuestran que también puede haber muy buenas intenciones detrás de la venta de un producto. 

El anuncio vende un seguro de vida de la empresa Muang Thai Insurance, pero la verdad es que contiene un mensaje que va más allá de conseguir clientes. Porque aunque ninguno de nosotros vaya a contratar un seguro tailandés, la historia nos inspira a todos. Nos hace recuperar la fe en la humanidad y en la capacidad de cada uno para marcar la diferencia. Sin importar lo pequeña que pueda parecer. (Por cierto, éste es un mensaje totalmente #Calcetinati ;-)

Para Mr. No Name este anuncio es otro ejemplo de "publicidad para el bien", no está regalando cafés o premiando donaciones de sangre, pero tiene un beneficio emocional para todos los seres humanos. Al menos para todos los que aún tienen un corazón que late con sentimiento. Enhorabuena a Ogilvy & Mather Bangkok, no nos extraña nada que esté en la lista de los mejores anuncios de la televisión. Lo que más nos ha gustado es que el "premio" por las buenas acciones sea el cariño que se recibe a cambio. Y además, que el ejemplo sea tan contagioso. Nos encantaría que se convirtiera en una pandemia mundial.

lunes, 19 de mayo de 2014

Érase una vez un gobierno con cojones


Este anuncio del gobierno danés para incentivar el voto de la gente joven ha causado tanto revuelo, que lo han acabado retirando. Pues qué lástima, la verdad. Sí, vale que es violento, explícito y hasta de mal gusto pero... ¿Se han preguntado a quién iba dirigido el anuncio? ¿Se ha quejado el público objetivo? Creemos que no. En publicidad cada vez es más difícil encontrar a clientes que se atrevan a arriesgar. Mucho menos con un sentido del humor a caballo entre Beavis y Butthead y Padre de familia pero con escenas no aptas para el prime time

La abstención juvenil en las elecciones es un problema grave. Hay una parte que no tiene arreglo (no se sienten representados y no nos extraña), pero si queremos que se involucren hay que hablarles en su idioma. Incluso si es a través de una colleja mental para decirles que no se puede "pasar de votar" y luego quejarse de las consecuencias. 

Para nosotros el anuncio es un acierto. Y no porque se trate de otro ejemplo de "mal o bien pero que hablen de ti", sino porque tiene todos los ingredientes para causar un gran impacto en el público objetivo. En una época en la que triunfan películas como Kick Ass o personajes como Stewie, un vídeo bonito lleno de mensajes sobre la responsabilidad cívica (da igual qué palabras se utilicen en el eslogan), caería en saco roto o los propios jóvenes lo convertirían en una parodia de sí mismo. En Mr. No Name no conocemos el humor danés, pero aún así aplaudimos  osadía de su gobierno al ir a por todas con este anuncio.

Con esto no qlaueremos decir que todo vale con tal de llegar al público objetivo. Existen límites que no se deben traspasar, como demostró el anuncio de Desigual para el día de la madre. En este caso compartimos la indignación colectiva. Lo más triste es que a esta marca no le hacía ninguna falta meterse en semejante jardín.

lunes, 12 de mayo de 2014

El "yo, me, mí, conmigo" está pasado de moda.


En Mr. No Name hoy celebramos que la epidemia positiva se propaga: hemos encontrado otro gran ejemplo de promiscuolaboración. En este caso se trata de Coshop, una tienda de ropa y complementos en la que conviven varias marcas. Tras este proyecto se encuentra Capitota, una productora de ropa dispuesta a incubar nuevas ideas.

Es cierto que una tienda de moda multimarca no es una novedad. Sin embargo, en Capitota Productions tuvieron en cuenta algo muy importante: que lo más normal es que recordemos el nombre de la tienda en lugar de las marcas de los diseños que se comercializan en ella. Por eso, decidieron dar a cada diseñador su propio espacio para que pudieran mostrar su identidad. Como ellos mismos dicen: "Tú entras en la tienda y sabes perfectamente dónde empieza y termina una marca”.

Por si fuera poco, apuestan por una moda sostenible (es una de las condiciones para estar presente en Coshop); siguen abiertos a nuevos diseñadores y sus locales revitalizan barrios desolados por la crisis (como sucedió con el barrio de Born en Barcelona cuando abrieron allí su primera tienda). Promiscuolaboración y WIN-WINidad. Bravo.